Recibían los Juveniles al siempre complicado equipo de Alpedrete.
No podía empezar el partido de mejor manera para los verdes. En el minuto 2, un balón filtrado por Jaime, es bien controlado por Julio que consigue el 1-0. Con el resultado a favor, los verdes dominan el partido y van generando ocasiones de gol. Pero el siguiente tanto lo anotan los visitantes, tras un exceso de confianza sacando el balón los delanteros de Alpedrete nos roban el balón cerca de la portería y consiguen la igualada en el 16´
Cinco minutos más tardes, y después de una de las mejores jugadas colectivas del encuentro, Miguel empuja de cabeza a la red un balón divido en la frontal. Viéndose atrás en el marcador, Alpedrete sube la intensidad de su acciones, gana más balones en el centro del campo.
Se llega al descanso con ventaja en el marcador, pero con la necesidad de recomponer al equipo tras las lesiones de Dani y Jaime.
Se preveía un segunda parte tormentosa, tanto de juego, como climatológicamente hablando.
Alpedrete mantenía un juego directo y merodeaban el área de David, pero entre los centrales y nuestro portero abortaban las ocasiones visitantes. Minuto 20 y se tiene que parar el partido por la tormenta de granizo. Viene muy bien este parón a los verdes para aclarar las ideas, mientras que a Alpedrete, el parón le bajó el ritmo de juego. La entrada de Cabrera da un aire fresco al equipo, que gana en verticalidad y vuelve a generar ocasiones jugando a la contra.
El tanto de la tranquilidad lo consigue Bilal, lanzando con personalidad desde el punto fatídico un penalti que le fue señalado.3-1
No se movería más el resultado.
Tres puntos más que se quedan en casa frente a un rival siempre peligroso.